¿Qué suplementos podemos tomar para frenar o invertir el proceso degenerativo? Hay algunos suplementos muy interesantes que pueden mejorar el estado del cartílago y sobretodo también ayudan a disminuir el dolor articular.
Entre estos suplementos están: el condroitín sulfato, la glucosamina, el ácido hialurónico y los antioxidantes
- CONDROITIN SULFATO:
Es uno de los llamados viscosuplementos y es técnicamente un glucosaminoglucano que son macromoléculas formadas por un número elevado de subunidades disacáridas que contienen hexosamina y ácido hexurónico. Estas macromoléculas no existen en estado libre en los tejidos y van asociadas a proteínas por lo que se llaman entonces Proteoglucanos.
El condroitín sulfato ayuda a mantener la estructura de los tejidos con gran matriz extracelular como es el cartílago de las articulaciones, los ligamentos y los tendones.
La existencia de grupos sulfato y ácidos urónicos del Condrotín Sulfato, los hace portadores de numerosas cargas negativas y están capacitados para fijar muy fuertemente los cationes (fija los iones de Calcio) lo que explica su presencia en las zonas de osificación. Tiene también una capacidad importante de retención de agua lo que ayuda a proporcionar la capacidad de resistencia compresiva al articular.
El efecto del condroitín sulfato sobre la articulación se da en:
- El cartílago, que ayuda a sintetizar proteoglucanos, ácido hialurónico y colágeno y por tanto a reparar la matriz mejorando la estructura dañada.
- Sobre las sustancias proinflamatorias como son los COX-2 o las Interleukinas -1 beta. Tiene efecto antiinflamatorio.
- Sobre la membrana sinovial, aumenta la síntesis de ac. hialurónico y reduce el derrame articular.
- Reduce la actividad catabólica de los condrocitos, inhibe enzimas proteolíticas como la colagenasa o la elastasa.
Actualmente existen ya estudios que confirman que la suplementación con condroitín sulfato y otros viscosuplementos que comentaremos, mejoran el dolor articular, disminuyen la inflamación y ayudan a regenerar las estructuras dañadas mejorando la capacidad normal del cartílago para absorber y distribuir la carga. Los efectos empiezan a notarse al cabo de dos semanas.
El Condroitín Sulfato no presenta toxicidad y las dosificaciones efectivas son de unos 1200 mg. al día. Normalmente el Condroitín Sulfato va asociado a otros suple-mentos como es la glucosamina y algunas vitaminas que actúan de forma sinérgica aumentando la efectividad.
Es importante tener en cuenta el tipo de Condroitín Sulfato que se utiliza, algunas formas son más absorbibles que otras, esto se ha demostrado en los estudios en los que se utiliza Condroitín Sulfato de bajo peso molecular.
- GLUCOSAMINA:
Es un monosacárido utilizado como viscosuplemento a menudo asociado al condroitín Sulfato por su efecto sinérgico.
Se produce de forma natural en nuestro organismo por los condrocitos, se sintetiza a partir de Glutamina y fructosa fosfato.
La suplementación con Glucosamina sulfato estimula la síntesis de glucosaminoglucanos y proteoglucanos necesarios para mantener la función del cartílago articular.
También mejora el potencial de difusión de la glucosa y los aminoácidos dentro de la cápsula articular y de la membrana sinovial, esto provee de los sustratos fundamentales al condrocito para sintetizar los proteoglucanos.
La glucosamina básicamente tiene tres cometidos a nivel articular:
1- Estimular el crecimiento de las células del cartílago.
2- Inhibir la destrucción de los proteoglucanos.
3- Aportar sustratos y ayudar a sintetizar nuevo cartílago.
Podemos encontrar diferentes tipos de glucosamina entre las cuales están, la glucosamina clorhidrato, la glucosamina sulfato y la n-acetil glucosamina.
La más usada y que se ha utilizado en muchos estudios científicos es la glucosamina sulfato, esta sal sulfatada de glucosamina se disocia en glucosamina y iones sulfato que tienen un rol importante en la síntesis de proteoglucanos.
Las dosificaciones efectivas son de 1000 a 1500 mg. al día. Atención a los diabéticos, la suplementación con glucosamina puede provocar un aumento de la resistencia a la insulina y también interacción con algunos medicamentos que se usan para la diabetes.
- ACIDO HIALURONICO:
El ácido hialurónico es un polisacárido formado por la combinación de: una molécula de n-acetil-D-glucosamina y ácido D-glucorónico.
Está muy difundido en el organismo y se puede encontrar en el cordón umbilical, en la sangre, en el líquido sinovial articular, en la piel y, en general, está presente en toda sustancia fundamental conjuntiva.
El ácido hialurónico tiene unas propiedades de viscosidad muy importantes así como una baja velocidad de sedimentación, pro-piedades que lo hacen muy adecuado para permitir una base deslizante, resistente a la compresión y muy adecuada para dar movilidad a las articulaciones sin que haya fricción.
Sabiendo donde se encuentra el ácido hialurónico en nuestro organismo y conociendo sus propiedades uno puede hacerse la idea de lo importante que puede ser esta sustancia y sus potenciales aplicaciones.
El ácido hialurónico se viene usan-do en inyección intrarticular para aumentar la concentración de éste en el líquido sinovial que baña la articulación y mejorar así su viscosidad y elasticidad sobretodo en problemas artrósicos de rodilla.
Este tratamiento, que reduce la inflamación y en muchos casos el dolor, se ha usado con éxito en el mundo equino para este mismo propósito.
El ácido hialurónico se utiliza también en estética para mejorar el estado de la piel ya que estimula la producción de colágeno y como material de relleno.
En deportistas existen varios estudios que corroboran su utilización para la mejora de la síntesis de colágeno articular y sobre todo para mejorar las funciones del líquido sinovial cuando ha perdido sus atributos principales.
También tiene un uso interesante para la recuperación de esguinces tal y como muestran algunos estudios en los que la recuperación de los deportistas suplementados con ácido Hialurónico se dio sólo en 11 días de media para volver a jugar, al contrario de los que recibieron placebo que tardaron de media unos 17 días para recuperarse y volver a jugar.
El ácido hialurónico parece ser que se absorbe también vía oral y da buen resultado para tratar atletas que padezcan un deterioro del colágeno articular y de las propiedades del líquido sinovial.
La obtención de ácido hialurónico suele ser a partir de las crestas de los gallos o de las aletas de los tiburones.
El ácido hialurónico se utiliza también por vía tópica en forma de cremas y geles, es excelente para las abrasiones, las úlceras y las llagas.
- ANTIOXIDANTES:
Los antioxidantes aunque no tienen efecto directo sobre la regeneración del cartílago articular, sí que tienen una importante acción antiinflamatoria ya que actúan sobre las interleukinas y citoquinas relacionadas con los procesos inflamatorios.
Un reciente estudio probó la utilidad de los antioxidantes para mejorar la inflamación de personas con procesos artrósicos.
De los cincuenta y cinco participantes de este estudio todos tenían elevados niveles de un marcador de la inflamación, llamado CRP o proteína reactiva C.
Al cabo de tres meses de suplementación, el grupo suplementado con antioxidantes mostró una disminución de los niveles de CRP de un 71%, además se redujeron los niveles sanguíneos de otros parámetros que sugieren una inflamación aguda como son el fibrinógeno que descendió un 37,1% y las especies reactivas del oxígeno o ROS que son sustancias prooxidantes y radicales libres, que descendieron en un 29,9%.
No es el único estudio que evalúa los antioxidantes como agentes antiinflamatorios naturales. Entre los más comunes están el transresveratrol, la quercetina, la narangina o el extracto de corteza de pino marítimo pignogenol.
Existen algunos antioxidantes provenientes de extractos vegetales que ejercen una función antiinflamatoria importante, algunos de ellos tienen un efecto probado sobre la inhibición de la actividad enzimática de la ciclooxigenasa.
Finalmente para aquellos deportistas que padezcan artritis de rodilla, se presentó un estudio a finales del año pasado realizado por un grupo de investigación de la Universidad de Sydney-Australia, donde se analizó el efecto que tenían sobre esta dolencia la realización de ejercicios con pesas libres, ejercicio isométrico y otros aparatos así como bandas elásticas.
La mayoría de estos estudios encontraron una reducción en el dolor y el 79% mejoró su movilidad después del entrenamiento de resistencia.
¿Qué tomar en cada caso?
En general podríamos decir que para mantener y sobretodo devolver las características básicas a nuestro cartílago articular, es más que aconsejable la nutrición de la articulación a través de suplementos que contengan Condroitín Sulfato y glucosalina (que podemos encontrar en diferentes concentraciones en los cartílagos de animales marinos como el de tiburón).
También en casos en los que se hayan perdido la elasticidad y capacidad de compresión del cartílago por exceso de actividad física o por una intensidad muy alta o por impactos muy repetitivos, este tipo de suplementos dan muy buen resultado sobre el dolor y la inflamación debida a estos motivos.
La adición de manganeso, vitaminas B y Selenio a la fórmula mejora la efectividad del suplemento.
Cuando se trata de casos de inflamación con perdida de los atributos del cartílago, un suplemento a base de ácido hialurónico y algunos antioxidantes como el pignogenol dan muy buen resultado.
Los suplementos con ácido hialurónico protegen el cartílago del desgaste, reducen el riesgo de inflamación y ayudan a paliar la sobrecarga que pueden sufrir algunas articulaciones por estrés físico.
Todos estos suplementos pueden ser combinados tanto para devolver la capacidad de amortiguación a la articulación sometida a estrés físico importante como para paliar la inflamación propia de esfuerzos intensos y de impactos repetidos debido al tipo de deporte practicado.
Sabías que:
- Hay muchas plantas que contienen antioxidantes y otras sustancias naturales que tienen un efecto antiinflamatorio natural. Algunos de estos nutrientes como el transresveratrol, la quercetina, la vitamina C y otros bioflavonoides se encuentran en alimentos y plantas de uso tradicional, así como en muchas frutas y verduras.
- El silicio tiene un rol importante en la mejora de la mineralización ósea y articular ya que es un componente estructural de huesos y cartílagos. El silicio orgánico parece ser el que mejor se absorbe y utiliza por el organismo.
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